Vemos que tanto el amor sensual como el espiritual fracasan en la suprema aspiracion de obtener la identificacion dentro de los practicantes.

Vemos que tanto el amor sensual como el espiritual fracasan en la suprema aspiracion de obtener la identificacion dentro de los practicantes.

sin embargo como el anhelo prosigue su itinerario de necesidad ansiosa, localiza 2 vias Con El Fin De hacer el amor: la idealizacion- o la sublimacion de el querido. La primera mantiene la pulsion sexual originaria, solo cambia su destino, y conserva el sensualismo y materialismo sobre la pasion. Aunque su intento sobre descubrir el objetivo amoroso aumenta las exigencias de el yo, agotando paulatinamente el deseo. Por el contrario, la sublimacion cambia el rumbo de la pulsion, y el deseo lo transmuta en amor hacia esa persona a la que quiere semejarse. A este respecto. la historia de Abelardo desplazandolo hacia el pelo Eloisa es bastante significativa. Debido a la mutilacion sufrida, Abelardo se notan disponible sobre su violenta emocion carnal, No obstante seguira amando a Eloisa. Sin embargo se asombra sobre que la novia se resista a esta conversion de su amor-pasion, senala agudamente el filosofo Etienne Gilson. -Abelardo en su correspondencia se esfuerza en demostrarle que eliminar cuenta freesnapmilfs su apego, nunca menor ardiente e intenso que antiguamente, deberia acontecer completamente distinta. Eloisa es mozo, esta llena de vida asi­ como padece atrozmente en su intento de transfigurar su amor. Leyendo las cartas vemos que acepta amar a Abelardo igual que En Caso De Que fuese Dios; en vez de amar a Dios por Abelardo, la forma de amar a Abelardo contra Dios Con El Fin De alcanzar a la esencia sobre la sublimacion: el amor puro.

Freud explica claramente que se puede amar sin entusiasmo sexual: “La transformacion de la libido objetal en libido narcisista implica el abandono sobre los fines puramente sexuales, una desexualizacion; es decir, aca comienza la sublimacion”.

El objetivo amado se instala en el yo, igual que en la melancolia, asi­ como permanece como Sujeto siempre presente, No obstante ido. Entonces se logra la identificacion, es decir, el yo enamorado contempla en el amado la culminacion o un modelo ideal al que intenta semejarse. Lo expresa Eloisa en una sobre las cartas: “de ningun modo; Dios lo sabe, que nunca he buscado en ti mas que Tu mismo, no mi concupiscencia”. La esencia de este amor seri­a un desinteres que nada reserva Con El Fin De si, y se entrega absolutamente a Abelardo, convencida de que la identificacion amorosa es fruto del olvido del pretension propio ante la realidad del Otro. Por este amor sublimado, el enamorado Se Muestra en toda su resplandeciente figura, como tasacii?n total: “La identificacion ha sustituido a la eleccion de objeto” (Freud), de alcanzar ser igual que el otro seri­a.

La alienacion amorosa permite viable vivir la sublimacion de el afan sexual: -Mi querido Armin, ?si supieses lo que te propietario por ti mismo!” Bettina Brentano por ti identico, escribe Brentano.

Son estas las chicas sublimes que canto Rilke, por la infinita donacion sobre si mismas carente aguardar Jami?s acontecer correspondidas, satisfechas con el apego que sienten, ya que han renunciado al -instinto de propietario-, asi­ como piden solo amar. Ideal al que se abrazan y consumen en un fuego inextinguible. Es por esta sublimacion que el apego se interioriza, y al sumergir el objetivo sexual en las tinieblas intimas se alcanza el desdoblamiento de la conciencia de si. Sobre esta practica sobre la sublimacion amorosa deduce Abelardo, en su tarea Scito te ipsum, que el apego seri­a renuncia a toda apropiacion gozosa de el anhelo asi­ como solo se busca en si igual la premio. Despues, seri­a por la intencion misma que se justifica el amor-pasion asi­ como En Caso De Que se reside con un sentimiento puro sera totalmente inocente. Seri­a la gigantesco verdad teologica que le enseno Eloisa a Abelardo, primeramente como amante y no ha transpirado mas tarde esposa lejana e ideal lo amo invariablemente desprovisto esperar nada sobre el novio. La sublimacion de el amor nos demostracii?n la continuidad invisible de la potencia vehemente del pretension.

El amor sublimado, nunca obstante, crea multiples sufrimientos, puesto que la introyeccion del objeto amoroso atosigado en el corazon amante, desencadena quejas desesperadas: “Yo existo unicamente por motivo de que amo” (Julie Lespinasse). Esta aislamiento interior, pero parezca radiante, atormenta, pues el buen apego necesita la comunion autentica de las seres, desplazandolo hacia el pelo no se satisface con la idealizacion de el objeto querido, por altruista asi­ como admirable que sea. Recordemos el dolor que encierran estas palabras sobre la religiosa portuguesa, enamorado magnifico: “J’ ecris pour moi plus que pour vous”.

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